domingo, 13 de febrero de 2011

Periodista como agente de cambio

El comunicador como agente de cambio


Cuando el ser humano tiene la dicha de venir a este mundo, por la gracia de Dios, tiene una misión desde el momento que nace. Así conforme crecemos, vamos discerniendo cual es el camino que tenemos que tomar, porque de esas decisiones importantes que se tomen en la vida, son las que deciden el futuro que nos espera.
En algún momento de este caminar, pensé como muchas  niñas, que cuando creciera iba a ser doctora. Ahora entiendo que esas cosas se piensan, pero cambian con el tiempo, porque de un momento a otro, cuando estaba en el colegio, comprendí que mi vocación es comunicar a las personas aquello que siento, pero al mismo tiempo brindarles mi escucha como un apoyo.
Entendí, que comprendiendo  a los demás, puedo al mismo tiempo ayudar a muchas personas, diciendo siempre la verdad y actuando según los principios que un día sembraron en mí mis padres.
Ahora estando en la Universidad, me doy cuenta, que no solo yo estoy en este medio, que hay mas compañeros que piensan similar a mí, que juntos queremos hacer de nuestro país, una tierra de democracia y de verdad, para un pueblo que tanto necesita un trato justo.
Corresponde a nosotros los profesionales del futuro, ser comunicadores visionarios, que no les de miedo decir la verdad, que no teman a la corrupción política y de la sociedad, que no se dejen llevar por falsas promesas, que logremos ver la realidad y por ende a los ciudadanos humildes inmersos en ella.
Al mismo tiempo es una gran responsabilidad ética que debemos tener, porque estar frente a un micrófono o a una computadora, es un arma de doble filo. Así como podemos ser agente de cambio para realzar la imagen de algo o alguien, también se puede venir abajo, por la información que se comunique.
Las personas ven al periodista o comunicador como figuras públicas, por eso es aun mayor el compromiso que hay que tener con el público. Lo importante  es darse a conocer como un profesional por el trabajo realizado, y no por chismes o comentarios.
Para mí, el comunicador se convierte en agente de cambio, cuando le apasiona lo que hace, cuando se compromete con su trabajo, y sabe que lo más importante es dejar huella por medio de la veracidad con que se informe.

Graciela Fonseca Solano

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